
Cuanto más cerca está el nacimiento de Diego, más echo de menos a Víctor. Espero recibir al bebé sintiendo algo. ¡Necesito tanto a Víctor!, aunque sé que estás viviendo, me gustaría tenerte aquí, a mi lado, entrando en la habitación de mamá y conociendo a tu nuevo hermanito. Ya hace 9 meses que te fuiste, pero todo sigue casi igual. El tiempo se paró el 13 de julio, ahora a pesar de hacer una vida casi normal, el sentimiento de tristeza es brutal, no nos hacemos preguntas, de porqué pasó esto, para qué, etc, etc. No queremos añadir más dolor al dolor. Estamos conociendo a muchas personas que resultan ser un bálsamo para nosotros, que nos ayudan a llevar este dolor, porque nunca se supera, hay que aprender a vivir con ello, dando lo mejor de uno a los demás, sin esperar nada a cambio.
4 comentarios:
Animo Antonio que ese nuevo retoño está más cerca que nunca. Estoy seguro que Diego llenará de luz y alegría vuestra familia. Soy feliz por ello.
Yo no tengo hijos por el momento,aunque puedo compartir y entender vuestro profundo dolor. No tendría que estar permitido que unos padres puedan perder un hijo.
Un abrazo muy fuerte para vosotros y todo el cariño del mundo desde Barcelona.
una nueva luz, que nunca eclipsara la que brilla en vuestros corazones por victor.
anims
socors
Hola Víctor, me llamo Ana. Tú no me conoces pero yo cada vez siento que te conozco más. Paso a menudo por aquí desde que te encontré. Soy amiga de tu tío David. No me atrevía a escribirte pero ya ves! estando aquí todos los miedos se van. Quería mandarte un beso muy fuerte a ti y a tus papas (y también a Diego claro!) y darles las gracias por darnos la oportunidad de conocerte. Un abrazo.ana
Por supuesto que no superaremos nunca la muerte de nuestros de hijos, es algo ilógico, intentaremos a aprender a vivir con este dolor de por vida, e iremos educando el dolor a la misma vez, cuesta, y mucho.
Este dolor se metió muy dentro y quedo en nosotros..............
Un abrazo.
Loly, la mamá de Ainhoa.
Publicar un comentario